Terapia de Movimientos rítmicos
La terapia de Movimientos rítmicos consiste en una serie de ejercicios físicos y rítmicos que nos permiten integrar correctamente los reflejos primitivos que se mantienen activos.
Los reflejos primitivos son movimientos involuntarios innatos del bebé que son necesarios para un correcto desarrollo neurológico.
Estos movimientos deberían tener una vida limitada para luego dar paso a los reflejos posturales, que son movimientos controlados desde partes superiores del cerebro. Si los reflejos primitivos permanecen activos habrá una debilidad o inmadurez cerebral que afectarán no sólo a sus habilidades motoras gruesas o finas, sino también a la percepción sensorial y cognitiva.
La terapia de movimientos rítmicos consiste en una serie de ejercicios que posibilitan la integración de los reflejos primitivos.
Los reflejos primitivos no integrados pueden causar trastornos en el movimiento, incapacidad de mantener una postura cómodamente durante cierto tiempo, movimiento constante, torpeza motora, respuestas exageradas a estímulos ambientales, cansancio frecuente, problemas de comportamiento derivados de su inquietud motora, déficit de atención y mala integración visuo-motora.
La no-integración de un reflejo supone que ciertos procesos se realicen mediante un esfuerzo continuo y consciente (lo que lleva a un agotamiento) y no de forma automática.